Equilibrar las exigencias de su negocio con un programa de grado profesional
En general, dirigir tu propia pequeña empresa es estresante, requiere mucho tiempo y es agotador. Para la mayoría de la gente, entrar en una escuela profesional (por ejemplo, una facultad de derecho o una escuela de negocios) es estresante, requiere mucho tiempo y es agotador. Ambas cosas no suelen combinarse bien. Además, la solicitud de ingreso en una escuela profesional puede suponer un gasto considerable en el balance, lo que obliga a muchos propietarios de pequeñas empresas a recortar gastos.
Los siguientes consejos, tomados de colegas que han obtenido títulos profesionales mientras dirigían su propio negocio, ayudarán a guiar a aquellos que buscan obtener un título profesional mientras siguen dirigiendo su propia pequeña empresa.
- Quédate en tu localidad. Aunque es tentador irse a estudiar fuera, lo más probable es que tu pequeña empresa necesite atención. «Para mí fue muy útil estar a media hora de mi negocio en todo momento», dice Betsy M., que se licenció en Derecho mientras dirigía una empresa de custodia. «Si surgía algo en el trabajo, podía estar en medio de las cosas apagando fuegos muy rápidamente». Por supuesto, este consejo es aplicable a los negocios de ladrillo y cemento más que a los de Internet, pero en cualquier caso debes ser consciente de las exigencias de tu negocio.
- Avisa a tus colegas. Las personas con las que haces negocios deben saber que estás planeando asistir a una escuela profesional, aunque sea a tiempo parcial y aunque creas que esto va a perjudicar a tu negocio (no tiene por qué). Para gestionar eficazmente tu tiempo, tienes que manejar las expectativas de tus clientes y compañeros de trabajo. Si creen que estás trabajando a tope y que estás cursando una carrera de empresariales en paralelo, te encontrarás con conflictos en los malos momentos. Como siempre, ser sincero es el mejor enfoque.
- Evita los cursos de preparación de exámenes «presenciales», que consumen mucho tiempo. Para entrar en una buena escuela profesional, tienes que hacerlo bien en el LSAT (examen de admisión a la facultad de derecho) o en el GMAT (examen de admisión a la gestión de posgrado), pero los cursos de preparación presenciales son demasiado ineficaces para serte útiles. Los desplazamientos, las charlas y la lentitud de la enseñanza le restan un tiempo precioso a su preparación para el examen. En su lugar, considere la posibilidad de tomar cursos de preparación en línea para el LSAT o el GMAT que le permitirán prepararse para el examen en la oficina mientras evita el tráfico o en casa. Además, estas clases suelen ser mucho más baratas.
- Acudir a las becas. Hay muchas becas disponibles para los propietarios de pequeñas empresas. Tu experiencia empresarial, combinada con una buena puntuación en el LSAT o el GMAT, te convertirá en un gran activo para muchas escuelas profesionales. Esto es así a pesar de un pobre expediente académico en tu institución de pregrado.
Ir a la escuela profesional mientras tienes tu propio negocio no es tarea fácil, pero se ha hecho. Esperemos que estos consejos te lo pongan algo más fácil.